El impacto de COVID-19 en los grupos minoritarios

La enfermedad del nuevo coronavirus de 2019 (COVID-19) ha afectado a los sistemas de salud del mundo entero. Las noticias muestran una y otra vez el impacto que esta pandemia ha tenido en las comunidades mundiales. A la fecha de hoy, los Estados Unidos tienen la mayor cantidad de casos de COVID-19 del mundo. Y esa cantidad aumenta día a día. Si bien varía la velocidad con la que COVID-19 se está propagando en algunos estados, los datos nuevos demuestran que la enfermedad está afectando a algunos grupos a niveles desproporcionados.

Reseña de las disparidades de salud en los Estados Unidos

Con los años, ha mejorado la salud de la mayoría de los habitantes del país, así como su acceso a la atención médica. No obstante, no siempre ha sido el caso para todos los grupos que viven en los Estados Unidos. Históricamente, los grupos minoritarios como los negros o afroamericanos, los hispanos, los indígenas americanos y los indígenas de Alaska han padecido peores resultados de salud que los blancos no hispanos. El acceso a la atención médica de calidad también ha sido un gran desafío para esos grupos.

Existen muchos motivos que lo explican, incluidos los factores sociales, económicos y ambientales, entre otros. Esos factores juntos conforman lo que se conoce como determinantes sociales de la salud  —es decir, las condiciones en las que uno nace, crece, trabaja, vive y envejece que afectan la salud durante toda la vida. 

COVID-19 y los desafíos para la salud de las minorías

Numerosos informes han destacado que existen graves disparidades (diferencias) en cómo COVID-19 afecta a algunos grupos raciales en los Estados Unidos y, específicamente, las tasas de mortalidad (muerte) en comunidades donde viven personas de raza negra o afroamericanos, hispanos, indígenas americanos e indígenas de Alaska. Esta situación crea una inquietud particular para las embarazadas que viven en esas comunidades. Por esas disparidades de salud, corren riesgo de sufrir complicaciones de salud y COVID-19 presenta un nuevo desafío para ellas. Un informe reciente de la Kaiser Family Foundation (en inglés) explica en detalle:

  • Tendencias alarmantes en muertes relacionadas con COVID-19. Al 6 de abril de 2020, la población negra representó el 59% de todas las muertes de COVID-19 en el Distrito de Columbia. En Luisiana representaron más del 70% de las muertes de COVID-19. Desafortunadamente, las muertes relacionadas con COVID-19 están afectando una cantidad más alta de personas de raza negra en esas áreas.
  • Las grandes disparidades existen. Aun en áreas en las que la comunidad negra es la minoría, esta representa la mayoría de los que están muriendo de COVID-19. En Michigan, los afroamericanos constituyen el 14% de la población total del estado, pero representaron el 41% de todas las muertes de COVID-19 al 6 de abril de 2020.
  • El seguro médico y los temores financieros son factores en el acceso a la atención médica. En comparación con la población blanca, es más probable que las personas negras y las hispanas no tengan seguro médico. Si bien se sancionaron leyes para ayudar a las personas sin seguro médico a tener acceso a las pruebas de detección de COVID-19, conseguir la prueba y el tratamiento de esta enfermedad puede ser más difícil para las comunidades de color. Por ejemplo, es posible que no sepan que existen esos servicios y que teman lo que va a costar si llegaran a necesitar asistencia en el hospital.

A la fecha de hoy, los hispanos en la ciudad de Nueva York  (en inglés) conforman alrededor del 29% de la población de la ciudad, pero representan casi el 34% de las personas que murieron de COVID-19. Como las poblaciones negra e hispana padecen tasas más altas de afecciones crónicas de salud como obesidad, enfermedad del corazón y diabetes tipo 2, en comparación con los blancos no hispanos, los expertos coinciden que la pandemia de COVID-19 está azotando a esos grupos minoritarios con mayor fuerza. Considerando que el sistema inmunitario de una mujer se debilita durante el embarazo, las embarazadas que pertenecen a una minoría y tienen una afección crónica de salud pueden ser particularmente vulnerables. De conformidad con los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), las personas con esas afecciones corren mayor riesgo de enfermar gravemente de COVID-19.

Llamado a la acción

Durante esta pandemia debemos reconocer los obstáculos y desigualdades que siguen afectando a los grupos minoritarios, incluidas las mamás y bebés de color, y lo que es necesario para cambiarlo. March of Dimes seguirá luchando para derribar barreras a fin de que todas las mamás y los bebés sean sanos.

Estamos vigilando la propagación de COVID-19 en todos los Estados Unidos y en todo el mundo. Los funcionarios de salud recopilan datos activamente para entender mejor la enfermedad y generan informes al respecto cada día. Estamos aquí para apoyarlos a usted y a su familia con la información que necesita saber durante esta pandemia.

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