El mercurio es un metal que debe evitar, especialmente durante el embarazo. Si usted tiene contacto con niveles altos de mercurio, puede dañar su corazón, pulmones, riñones, cerebro y otras partes de su cuerpo. Estar expuesto al mercurio durante el embarazo puede causar serios problemas de salud para su bebé.
Puede estar expuesto al mercurio a través de:
- Su piel, al tocar mercurio líquido. Esto puede suceder si se rompe un producto lleno de mercurio. Los productos que pueden contener mercurio incluyen termómetros para la fiebre, bombillas fluorescentes y algunas antigüedades, como relojes, barómetros y espejos.
- El aire, al inhalarlo. Se libera en el aire después de derramarse o algo que lo contiene se rompe. Se libera a través de procesos industriales, como quemar desechos o quemar carbón en plantas de energía. Pequeñas cantidades de mercurio provenientes de empastes dentales hechos de amalgama pueden entrar en el aire que respira. Estos empastes son seguros para adultos y niños mayores de 6 años, pero no sabemos sus efectos en mujeres embarazadas.
- Comer o beber comida o agua contaminada con ella. Una vez que está en el aire, el mercurio puede depositarse en el agua. Los peces obtienen mercurio del agua en la que nadan y de comer otros peces que tienen mercurio. Este tipo de mercurio se llama metilmercurio.
¿Debe comer pescado durante el embarazo?
El pescado es una excelente fuente de proteínas, grasas saludables llamadas omega-3, vitaminas y minerales. Por ello es beneficioso comer ciertos pescados durante el embarazo y durante la lactancia. La Administración de Medicamentos y Alimentos (FDA, por sus siglas en inglés) recomienda que las mujeres embarazadas o que estén amamantando consuman de 8 a 12 onzas por semana de pescado con bajo contenido de mercurio. Estos incluyen:
- Salmón
- Merluza
- Trucha
- Tilapia
- Bacalao
- Lenguado
- Corvina
- Camarón
- Cangrejo
- Sardinas
- Atún claro enlatado
Algunos pescados se recomiendan en cantidades más pequeñas. Si prefiere comer pescado como atún blanco (albacora), atún de aleta amarilla, lubina chilena, pargo, mero o mahi mahi, puede comer solo 4 onzas de ellos por semana. Cuatro onzas es aproximadamente del tamaño de la palma de tu mano.
Los pescados con grandes cantidades de mercurio incluyen el pez espada, el tiburón, el rey caballa, algunos peces de aleta, el marlin, el reloj anaranjado y el patudo. Evite comer estos pescados durante el embarazo o durante la lactancia.
Otras formas de evitar el mercurio
- Si necesita arreglar una carie dental, consulte a su dentista acerca de sus opciones. Es posible que pueda usar un relleno (amalgama) que no contenga mercurio. No quite ningún relleno de mercurio a menos que su dentista lo recomiende porque está roto o dañado. Asegúrese de que su dentista sepa que está embarazada antes de que le hagan un trabajo dental.
- Si rompe un objeto que contiene mercurio, pida ayuda a un adulto que no sea una embarazada. Póngase en contacto con su departamento de salud o departamento de bomberos local para preguntar cómo desechar el mercurio.
- Si puede estar expuesto al mercurio en su trabajo (como en el consultorio de un dentista o si realiza trabajos eléctricos, químicos o de minería), hable con su jefe acerca de las precauciones de seguridad. Pregunte si puede cambiar a una posición diferente durante el embarazo.
- Hable con su proveedor de cuidados de la salud si le preocupa la exposición al mercurio durante el embarazo.
Para obtener más información, visite nacersano.org.
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